Vecinas y vecinos de Bouwer relatan sus emociones una semana antes del 1° de abril, fecha en que dejará de operar definitivamente el vertedero de residuos que la ciudad de Córdoba administra (desde hace 28 años y por 7 días más) en las cercanías del pueblo.
Testimonios a pocos días del cierre que supieron conseguir.
"A mí me duele la panza. Estoy cosiendo como cien bolsas, tengo que hacer los banderines, los pasacalles. ¡Unos nervios! No veo la hora de que llegue el 31 a la noche, no el 1°". Verónica Ferrer, vecina de Bouwer [desde su ventana en el barrio de las casas amarillas puede ver la fila de camiones descargando sobre la montaña de basura]. "Yo también. Estoy desesperada porque llegue el 1°. Y a parte de eso, quiero participar de la remediación. Es por eso que voy a estudiar una licenciatura en ciencias del medio ambiente". Isabel Pires, vecina de Bouwer [es docente jubilada]. "Estoy muy ansiosa. Yo soy la que está cambiando los días del cartel de la ruta. Esto de cambiar los días, colocar pasacalles, banderitas, siempre colocando algo nuevo al cartel cosa de que llame más la atención. Son emociones muy grandes, cosas muy fuertes que te están pasando a la vez que yo he visto cosas todo el tiempo, camiones que están pasando, máquinas que están entrando todo el tiempo a tirar basura y ahora todo lo contrario. Ver que las máquinas se están yendo de a poco, ver que salen con los rollos de membrana. Todos los días tengo noticias nuevas y para mí es una emoción muy grande. Es algo raro y lindo a la vez". Mónica Rescala, vecina de Potrero del Estado [vive allí desde que nació, hace 28 años. El mismo tiempo lleva funcionando el vertedero de residuos].
"Me acuerdo cuando hace 28 años empezaron a hacer los bordos. Empezaron con máquinas haciendo los bordes alrededor, hasta que empezaron a hacer los pozos y poner plantas todo alrededor del basural. Y ahora que se terminan los días, todas las mañanas cuando abro mi quiosco, veo el cartel. Es lo primero que veo cuando abro y hasta la noche que me acuesto. Cuando cierro la ventana estoy viendo el cartel. Así que para mí está bien". Yolanda Rescala, vecina de Potrero del Estado.
"Me parece que era una cosa que no se podía creer. Más de una familia me dijo a mí que era imposible. A mí lo que me gustaría recalcar es la gente de acá del pueblo, que si no hubiera sido por ellos capaz que no lo cierran. Y si quieren me pongo a llorar porque también me emociono. En serio te digo".
Fabián Moggi, vecino de Bouwer [emocionadísimo].
"Estoy nerviosa. Ansiosa porque llegue el día para ver los logros cuando lo cierren y la lucha de los vecinos. Que llegue el día para festejar". Soledad Sánchez, vecina de Bouwer.
"Todos estamos muy contentos y creo que hemos demostrado que luchando todo se puede. Creo que todos lo hicimos más que todo por nuestros hijos, nuestros nietos. Todavía falta mucho para el tema de la remediación y que se solucione todo, pero creo que uno de los grandes pasos ya se dio. Es un momento muy lindo para todo el pueblo, más allá de que algunos lo demuestren y algunos no. Un poco se lo dedico a todos los incrédulos que dijeron que nunca lo íbamos a lograr, que era una pérdida de tiempo, que la política podía más, que nosotros no teníamos nada que hacer". Raquel Ferrer, vecina de Bouwer.
"La verdad es que es una fecha importante, no solamente para nosotros sino para que la gente del pueblo vea lo que se ha logrado en poco tiempo, a pesar de que mucha gente no creía que esto se iba a lograr. Pero realmente fue un paso muy importante lo que hizo Bouwer con el tema de la basura". Julio, vecino de Bouwer
"Estoy muy ansiosa esperando que llegue el día del cierre y esperando también que llegue el día sin olor, sin las moscas. Me siento muy, muy orgullosa de lo que hemos logrado, también para demostrarle a todos los que se nos ríen, que nos dicen que somos ridículos y que no creen todavía que se va a cerrar el basural. Así que estoy muy contenta". Alejandra Peralta, vecina de Potrero del Estado.
"Yo voy a destacar ante todo la participación activa de los vecinos, algunos más pasivos, pero sí con un final que es el del cierre definitivo. En forma personal, ¡yo me siento absolutamente feliz!"
Alicia Alfonzo, vecina de Bouwer.
"Yo quiero destacar la orientación, agradecerle a nuestros asesores que hemos podido llegar a este objetivo, porque ha sido importante el apoyo por parte del intendente y de todos ustedes que apoyaron todo esto, nos orientaron. Eso quiero destacarlo. Agradecido de que hemos podido llegar a la meta también gracias a todos ustedes". Pedro Arce, vecino de Bouwer.
"Estoy ansioso. Muy, muy ansioso. Después de tanta, tanta lucha, de idas y venidas, hemos logrado una cosa fundamental, histórica para nuestro pueblo y para nuestros hijos el día de mañana. Ahora, esperando seguir otra lucha más que sería la remediación. Como siempre se lo digo yo a mi señora, esperemos que esta nueva generación de los chicos ya venga mejor, que puedan respirar el aire puro que se necesita en este pueblo. Yo le deseo a toda la gente que ha estado, y a la que no ha estado, gracias por haber estado con nosotros apoyándonos en las buenas y en las malas. Seguiremos ahora luchando por otro proyecto que sería la remediación y vamos a estar al pie del cañón, como se dice, para lo que siga de acá para adelante".
Pedro Sánchez, vecino de Bouwer.
"Faltan pocos días para mostrar lo que poca gente o mucha gente pueden hacer por un lugar, chiquitito o grande, no importa el tamaño. Lo importante es tener la convicción de saber lo que se va a hacer y dejarle ese ejemplo a quienes vienen detrás. No importa si somos gran cantidad. Lo importante en este momento es el logro. Y si mañana nuestros hijos, nuestros nietos, eligen este lugar para vivir, como lo elegimos nosotros, sepan que hubo alguien antes, no importa cuántos, pero que trataron de cuidar ese lugar para ellos. Eso pienso que es lo más importante que dejó en mí todo esto. Yo siempre me pregunté cuál es la misión que tengo en este lugar. Para mí era, y sigue siendo por ahí pasajero. Por ahí me pasa la idea de irme de este lugar. Pero siempre hay cosas que me comprometen y me van haciendo quedar. Quizás mis raíces queden acá. Ya mis nietos son bouwerenses, como les digo yo, y mi último hijo también. Y bueno, pienso que a ellos hay que dejarles ese legado. No sé si será importante. Un granito chiquitito pienso que en algún momento va a llegar a ser una montaña grande, pero esta vez, no de basura". Blanca Ayala, vecina de Bouwer
Me emociona leer estos testimonios.
ResponderEliminarEl 1 estaremos allá.
Un abrazo a cada uno, Liliana
Felicitaciones a todos!!!!
ResponderEliminardespues de tanto sacrificio y lucha, emociona verlos tan felices...
fuerza!!!!
abrazo
¡¡¡ Felicitaciones para todos los que pusieron el cuerpo las ideas y las ganas!!!
ResponderEliminarPara todos son un maravilloso ejemplo de que:
" QUERER ES PODER "